martes, 8 de octubre de 2013

Un día con gripe



Estoy con gripe. Salgo de las clases de inglés y me dirijo a la farmacia más cercana para comprarme unas pastillas contra la gripe y algo de velocentina, syntheisitiseina o drencromina. Bueno, vale. Esas 3 últimas no.

Al fin compro 2 pastillas y camino un rato al siguiente paradero y no al más cercano; ya que, no quiero que los demás me vean con mi pañuelo todo húmedo  ni cuando estornudo. Pienso que al llegar ya habrá disminuido los síntomas de la gripe. Camino de lo más jodido y en eso veo pasar a una chica no muy guapa pero tampoco fea; no obstante, tiene el cuerpo de una epopeya, mis deseos llevados a la demencia, un ángel embriagado de sol y de hermosura. Empiezo a recordar que no me gusta ver a las mujeres de esa forma; supongo, por tener una hermana, y al mismo tiempo para no considerarme un animal que se deja llevar por sus instintos; sin embargo, ya vi sus hermosas caderas resaltadas por el pantalón ajustado, pero me resisto y he logrado ignorar su prodigioso cuerpo.

Un señor de unos 60 años voltea a verle sus nalgas. Joder, mi padre debe tener 50 años, me pregunto si hará lo mismo. Otro grupo de chicos cercanos a mi edad voltean a verle. Parece que esta chica está despertando un oleaje de pasiones –Maldita sea, los hombres somos demasiado pervertidos- Desde una combi, el cobrador, le silva y sin ser, yo, una mujer me repugna tal acción. En fin, llego al paradero  y tomo mi carro. Parece que la gripe está desapareciendo, pero como dicen que la gripe no tiene cura; aquello es imposible, son los síntomas los que están desapareciendo. Subo, miro buscando un asiento vacío donde la gente no pueda prestar atención a mi húmedo pañuelo y ojos vidriosos. Me siento, parece que ya estoy bien. Joder, se sube una chica que por cierto es simpática y lleva una bolsa amarilla. Ella empieza a sacar mandarinas y a comérselas. Joder, el olor de las mandarinas está reavivando los síntomas de la gripe. Llego a casa y voy corriendo a mi cama. Me tiro con extrema violencia, no quiero saber nada del mundo. Así toquen la puerta, llamen por teléfono; no abriré, no contestaré ni aunque fuese el mismísimo Dios.

Pasó media hora, voy a la farmacia y quiero comprarme otras pastillas; pero, hay una tía delante de mí que está teniendo una larga conversación. -Paso de ella- Han transcurrido unos 5 minutos, lo sé, porque miro la hora en mi celular, y digo ¿pero qué coño? ¿Por qué carajos se demora tanto? Ajusto el sentido del oído y logro escuchar que no sabe que pastilla comprar y que la chica de ayer le vendió lo que indicaba la receta. Ella empieza a explicar sus síntomas y joder, esto tiene para rato. Me largo, no sin antes decir un ligero “te pasaste de pendeja” – Pierdo la timidez cuando estoy soberanamente jodido – He llegado a una tienda. No es farmacia, pero venden pastillas contra la gripe. Claudia me atiende y me dice que no hay –No importa Claudia, te perdono porque estas bien rica. Maldición, lujuria detected, reprimo mis impulsos- .Me voy a otra tienda, cerca de mi casa, y me dicen que no hay –Al parecer el universo conspira contra mí - Tuve que ir al mercado, no quería caminar mucho con esta gripe, pero no hubo de otra.

Llego a casa, me sirvo un café súper caliente y me tomo mis tres pastillas –A acabar con los síntomas de una vez- ; mientras, recuerdo que un doctor me dijo que las pastillas contra la gripe no hacen efecto si las tomas con café o no sé si se refería a todas las pastillas en general. No importa, de todas formas, ya he tomado varias veces las pastillas con mi amado y delicioso néctar de los dioses, y me ha hecho efecto. Las pastillas me provocan sueño y caigo rendido en la cama con todo y zapatos. Ya ha pasado 3 ó 4 horas. No sé a qué hora me quedé dormido. Abro los ojos con mucho esfuerzo y joder los estornudos siguen ahí. Me voy a la cocina, me preparo un delicioso y suculento “arroz con huevo y plátano frito” y me tomo otras 3 pastillas más: levocert D, nastizol, panadol allergy; 3 horas después ya estoy bien.

Empiezo a recordar el aroma del café y recuerdo que el café despierta los síntomas de mi gastritis, pero es demasiado tarde, soy un adicto al café, y recuerdo un poema de Juan Gonzalo Rose que menciona al cafecito

Cada tarde te pierdo
como se pierde el tiempo,
o la esperanza.
Cada tarde, definitivamente,
te pierdo como se pierde la paciencia.
Cada tarde dices no.
Mueves la cabeza y dices no.
Mueves la tierra y dices no.
No mueves los labios y tu silencio
dice no.
Infatigablemente,
cada tarde,
mi café solitario obscurece
el planeta.

El café te pone hiperactivo y en mi caso en particular me hace atreverme a cosas que normalmente no haría por miedo o vergüenza. Una vez estaba yo parado en una combi dirigiéndome a casa cuando un gilipollas que se había sentado con la mochila puesta en su espalda se para, y me da con toda la mochila en la cara; para lo que va a suceder después he tomado mi café como profeta de lo que va a llevarse a cabo. Agarro la mochila con mis dos manos y lo empujo sin disimulo, luego me siento. El cabrón ese voltea hacia mí y me dice que no me pase de faltoso, yo le digo “no seas pendejo, me has puesto toda la mochila en la cara. Me llega altamente la gente que al bajar del carro no le importa incomodar a los demás al pisarles los zapatos, al golpear con los codos o en tu caso al poner todo ese tumulto de mochila en mi cara”. El tío me mira con odio, no dice nada y se baja. Si no hubiese tomado mi café, habría sido diferente; seguramente, habría dicho algo como “oye amigo, ten cuidado con tu mochila”. Punto para el café C:

Ah delicioso café eres mi hachís, mi jaco y mi speed. Ok no ._. 

Hablando de eso. Contacté con alguien para que me venda maría. Últimamente, estoy deprimido y quiero experimentar la alegría aunque sea efímera, falsa y de magia traidora. Quedé con el contacto para cierto día. Le llamo el día acordado, una hora antes, para no ir en vano. No me contestó, por lo que teniendo dinero que quería desaparecer de mis manos me fui a la feria del libro de la upc y me compré “Paraísos artificiales” de mi dios Baudelaire. ¡Baudelaire hazme un hijo! Ok no ._. 

Hablando ahora de Baudelaire, me hubiera gustado conocerlo, tenía el rostro de un solitario amargado; pero...


pero, aun así me hubiera gustado conocerlo, aún si yo le hubiese caído mal. Es para mí, el poeta más excelso de todos. – joder, cuando hablen de Baudelaire deberían hablar en términos encomiásticos y de excelsitud u_u - Empiezo a recordar a un gilipollas de la San Marcos, que se daba de intelectual y que no paraba de hablar de Nicanor Parra –No tengo nada en contra de ti, Nicanor; gran poeta, pero no fuiste creador de una corriente, ni revolucionaste la poesía como sí lo hizo Baudelaire - y que curiosamente conocí en las clases de inglés, tiempo atrás. Le dije”yo soy un friki de la literatura. Mi poeta favorito es Baudelaire” y el muy gilipollas me dice que no sabe quién era Baudelaire; se lo puedo pasar a cualquiera, a una persona promedio, pero no a un estudiante de literatura y menos a este gilipollas que le faltaba año y medio para terminar su carrera.

¡Dios, como odio a esos pseudointelectuales! Baudelaire, mi dios, padre de la poesía sin rima, precursor del Simbolismo, nuevamente padre, y maestro mágico, liróforo celeste que al instrumento olímpico y a la siringa agreste diste tu acento encantador maldice a todos esos hijos de puta que estudian literatura en la universidad y no saben de ti u.u

En fin, despierto hoy… y sigo teniendo gripe.

2 comentarios:

  1. que significa liróforo?
    ya se te pasó la gripe?
    de verdad te vas a conseguir un chaqué?

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    Respuestas
    1. mmm...
      liróforo es aquella persona que compone poemas y está dotada de las facultades para componerlos. O sea, un poeta xD-

      Sí, después de 4 días.

      Chaqué? mmm... lo malo que ayer hizo calor y con un polito simple ya estaba sudando horrores, que sería con un chaqué. Ya se acerca el verano. Recomendaciones?

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